En un movimiento digno de una superproducción política, Javier Milei volverá a pisar fuerte en Washington para compartir escenario con nada menos que Donald Trump durante el sorteo del Mundial 2026. El encuentro, programado para el 5 de diciembre en el imponente Kennedy Center, promete ser más un show de poder que un simple evento deportivo. Según fuentes cercanas a la organización, ambos mandatarios ocuparán un palco exclusivo preparado especialmente para ellos, como si se tratara del estreno mundial de una película de alto voltaje político.
Mientras la FIFA prepara la ceremonia que definirá el destino de las 32 selecciones ya clasificadas, Milei y Trump buscarán capitalizar el escenario global para reforzar una alianza que crece con cada foto, cada saludo y cada guiño ideológico. Con Estados Unidos, México y Canadá como anfitriones del primer Mundial organizado por tres países, la presencia de ambos líderes ultraconservadores promete robar todas las miradas… y quizás también unos cuantos titulares incómodos.
El sorteo será apenas la antesala del megaevento deportivo que comenzará el 9 de junio de 2026 y terminará 40 días más tarde con una final de película. Pero detrás del glamur mundialista, lo que realmente enciende rumores en los pasillos de Washington es el renovado acercamiento entre Milei y Trump: una sociedad política que, entre acuerdos comerciales y fotos en el palco presidencial, busca convertirse en un símbolo de la nueva derecha global.