Recién salidos de las urnas, tres caras nuevas del Consejo Escolar de Necochea –Cintia Del Cunto (La Libertad Avanza), Mateo Boncore (Fuerza Patria) y Elizabeth Ortega (Nueva Necochea)– se sentaron a debatir sobre el futuro de la educación local. Cada uno con su impronta política, pero todos apuntando a lo mismo: escuelas en pie, alumnos contenidos y un sistema que funcione pese a la crisis.
La infraestructura fue el primer round: desde aulas que se caen a techos que esperan reparaciones eternas, la urgencia quedó clara. Del Cunto habló desde la mirada de madre y vecina, Boncore encendió las alarmas por los recortes nacionales, y Ortega recordó la desinversión de años anteriores, detallando números de inversión provincial que apenas alcanzan para tapar baches. Entre reclamos, coincidieron en que la escuela no puede seguir siendo rehén de la burocracia.
Pero no todo fue ladrillo y cemento: la alimentación escolar también se coló en la mesa. Del Cunto puso el acento en las familias que dependen del comedor, Boncore reclamó una política pública que garantice comida sana y Ortega sacó chapa con la incorporación de nutricionistas para controlar los menús. Más allá de colores partidarios, el mensaje final fue compartido: la defensa de la escuela pública exige compromiso y diálogo, porque sin consenso no hay futuro educativo posible.