Un lunes que arrancaba tranquilo terminó con un verdadero thriller policial en las playas cercanas a los molinos eólicos de Necochea. Pasado el mediodía, un hombre de unos treinta años fue hallado tirado en la arena, herido y desorientado, diciendo que había sido secuestrado, drogado y baleado. El insólito episodio dejó helados a los socorristas que lo encontraron cerca del agua, con la ropa hecha jirones y visibles heridas en ambas piernas.
Según relataron testigos, el sujeto –en evidente estado de shock– balbuceaba detalles de su pesadilla: que lo habían subido a la fuerza, drogado, y luego ejecutado a balazos en las piernas antes de abandonarlo en la playa como si fuera un paquete indeseado. Las marcas de lo que parecían ser impactos de bala coincidían con su relato, aunque las autoridades aún no confirmaron oficialmente los detalles. Fue llevado en una camioneta hasta una ambulancia y de allí, directo al Hospital Emilio Ferreyra.
Por ahora, la identidad del hombre se mantiene en secreto y su estado de salud es una incógnita, aunque se sabe que está siendo atendido por médicos. La Policía ya inició una investigación para esclarecer si se trata de un caso real de secuestro o si hay algo más turbio detrás de esta historia sacada de una serie de crimen. ¿Un ajuste de cuentas? ¿Un mensaje mafioso? Todo está bajo la lupa.