El intendente Arturo Rojas volvió a decir “presente” donde hay cámaras y cintas para cortar. Esta vez fue en la Expo Educativa 2025, que se realizó en la Escuela Secundaria Nº7 “Raúl Alfonsín”, donde cientos de estudiantes del último año del secundario recorrieron los stands con ofertas académicas. El evento, como cada año, fue organizado por la Dirección de Psicología Comunitaria y Pedagogía Social Región 20. Pero más allá de la puesta en escena, la realidad educativa del distrito continúa olvidada y con serias falencias que ni las cintas ni los discursos logran maquillar.
Rojas aprovechó la jornada para posar con funcionarias y pasearse por los puestos, mientras el municipio mostraba con orgullo su Instituto Superior Municipal y la presencia de áreas como Turismo, Producción y Juventud. Incluso se encargaron del transporte de alumnos del interior, un gesto que, aunque positivo, no alcanza para tapar los techos que se llueven, las aulas que faltan y la desconexión entre el sistema educativo local y la demanda real de los jóvenes que egresan sin saber si podrán estudiar o trabajar en su ciudad.
Mientras el Intendente se esfuerza por figurar en todos los actos posibles, sigue sin dar respuestas estructurales a los problemas de fondo. Más allá de los stands y las selfies, los estudiantes de Necochea siguen enfrentando un futuro con pocas certezas y muchas promesas recicladas. La Expo Educativa sirve para mostrar, pero no para resolver. Y la educación, al final del día, necesita mucho más que un corte de cintas.