Un operativo de rutina terminó con final de película: un hombre de 36 años, con pedido de captura vigente, fue esposado en plena vía pública tras ser reconocido por efectivos de la Comisaría Primera. La escena tuvo lugar en la esquina de Avenida 58 y calle 65, donde el delincuente intentó pasar desapercibido… sin éxito.
El sujeto era intensamente buscado por la Justicia por un robo y tenía una orden de detención firmada por el Juzgado Correccional N°1 del Departamento Judicial de Necochea. No hubo persecución de película ni escena de acción: apenas fue identificado, los uniformados lo redujeron sin mayores vueltas.
Ahora, el protagonista del hecho duerme en la seccional Primera, mientras espera que la Justicia decida su futuro. Un punto más para la Policía local… aunque queda claro que todavía hay muchos delincuentes sueltos por las calles.