Cambios en el gabinete de Arturo Rojas generan controversia

Desde hoy, comenzaron a regir modificaciones en el equipo del intendente Arturo Rojas, lideradas en conjunto con Ernesto Povilaitis, secretario de Legal y Técnica y estrecho colaborador del mandatario. Entre los ajustes, se destaca un cambio que ha causado revuelo: el despido de Alejandro Silva del área de Comunicación y Prensa, uno de los movimientos más significativos dentro de una serie de decisiones que, en su mayoría, consisten en simples enroques internos. Este ajuste, que contrasta con la falta de una verdadera renovación o austeridad en otros sectores, ha sido interpretado como una señal de reconfiguración estratégica en el círculo de confianza del intendente.

La decisión de apartar a Silva, reconocido por su cercanía con Rojas y su rol visible en eventos oficiales, ha sorprendido a propios y extraños. Este paso dio lugar a la designación de Verónica Bracone como su reemplazante, una figura que ha estado ausente del ámbito mediático y político local durante años. Bracone, conocida por su portal Nova Necochea, caracterizado por replicar contenido sin mayores aportes propios, no ha logrado conquistar la confianza de los periodistas locales, quienes ya han expresado su descontento por su llegada al cargo. Su falta de experiencia reciente en coberturas relevantes y dudas sobre su manejo de recursos han sido temas centrales en las críticas.

El nombramiento también reaviva sospechas sobre la alineación de Nova Necochea con el oficialismo, planteando preguntas sobre el propósito detrás de este cambio. Algunos observadores sugieren que esta estrategia podría estar orientada a fortalecer la presencia mediática del gobierno local y acentuar su control comunicacional. La elección de Bracone, con antecedentes que incluyen operaciones mediáticas y un enfoque polémico hacia sus adversarios políticos, refuerza la percepción de que Rojas busca consolidar su poder a través de los medios. El impacto de esta decisión y su influencia en la dinámica política local aún están por verse.