Lo que empezó como una investigación por carreras clandestinas terminó destapando una historia digna de “Rápido y Furioso”, pero versión low cost en Necochea. Doce allanamientos simultáneos, 20 motos secuestradas —algunas robadas, otras sin patente y una con los números de motor y chasis limados—, seis jóvenes detenidos y, como si faltara algo, marihuana hasta en las macetas.
La policía local, con refuerzos de Lobería, irrumpió en viviendas de Necochea y Quequén y se topó con un combo explosivo: motopartes, celulares, ropa para correr picadas y hasta caños de escape para hacer los famosos “cortes”. Pero lo más inesperado fue la mini plantación de cannabis: más de 25 plantas y varios frascos con cogollos listos para el “after picada”. Por supuesto, ahora los muchachos tienen una causa más que sumar: infracción a la Ley de Drogas.
Los seis aprehendidos, de entre 19 y 23 años, pasaron de acelerar en avenidas a esperar la indagatoria tras las rejas. Las autoridades no descartan nuevas detenciones. Mientras tanto, el barrio duerme un poco más tranquilo… y sin el zumbido nocturno de las motos sin silenciador.