“DOS CHOQUES, UNA MOTO VOLANDO Y UN CLÍO DESTROZADO: NOCHE DE METAL RETORCIDO EN QUEQUÉN”

Las calles de Quequén vivieron una jornada para el olvido: primero una moto terminó desparramada frente a la Plaza Dardo Rocha y, más tarde, dos autos se dieron de lleno en la 542 y 523, dejando a un conductor con politraumatismos directo al Hospital Ferreyra. Al parecer, los conductores siguen creyendo que manejar es un juego de PlayStation… sin control ni respeto por nada.

En el primer round, una moto Honda Repsol voló por el aire tras impactar contra una Ford Ecosport. Milagrosamente, la motociclista salió caminando gracias al casco, aunque terminó tirada junto al cordón. Defensa Civil hizo su aparición estelar, pero no fue necesario llamar a la ambulancia. Claro, si vas a estrolarte, mejor hacerlo con estilo y precaución.

El segundo acto fue más violento: un Renault Clío y un Ford Fiesta protagonizaron un clásico “yo paso primero” con final de chapa y ambulancia. Resultado: un conductor con varios golpes y la Policía caratulando el episodio como “lesiones culposas”, como si eso curara los moretones. La científica también pasó por la escena, a ver si entre los vidrios rotos y los papeles del seguro alguien encuentra algo de sentido común en el volante.