Con foto, sonrisas y discursos de catálogo, Andrea Cáceres y el ministro Andrés “Cuervo” Larroque presentaron el nuevo Observatorio Social de Niñez y Adolescencia. La movida, celebrada como un gran avance institucional, busca monitorear cómo (y si) se cumplen los derechos de chicos y chicas en la Provincia. Una suerte de “Gran Hermano” estatal con psicólogos, abogados, ONGs, curas y hasta universidades, todos listos para medir indicadores y proponer mejoras que, hasta ahora, brillaban por su ausencia.
“Esto no es solo una norma más”, dijo Larroque, sin que nadie lo contradiga. Cáceres, por su parte, apeló al discurso emotivo, hablando de transformar lo ya hecho, como si el pasado fuera otro gobierno. Entre los presentes, también estuvo la defensora nacional Marisa Graham, que deslizó un dato brutal: el 40% de la infancia argentina está en la provincia. O sea, si acá fallan, fallamos todos.
El Observatorio será dirigido por Karina Nazábal y tiene más miembros que una final de Gran DT: desde médicos y trabajadores sociales, hasta representantes de asociaciones civiles como AMI y CODESEDH. Todos comprometidos a hacer que esta vez sí funcione el sistema de protección infantil. Porque después de años de parches y discursos, parece que ahora sí se dieron cuenta de que mirar no alcanza: hay que actuar. ¿Será esta la vencida?